lunes, 24 de mayo de 2010

casi en la hierba



casi tocando
la hierba, las ramas
de la morera

4 comentarios:

  1. A veces un haiku es tan real como una fotografía.
    Viendolos juntos son lo mismo, aunque he de decir que me gusta más leerlos, por eso de la imaginación.
    Un placer pasar por aquí.

    ResponderEliminar
  2. es un gusto verte por mi casa amigo

    Un Abrazo
    Juan Carlos

    ResponderEliminar
  3. .


    Un haiku "baila" en la finísima línea divisoria entre lo banal y lo maravilloso.

    ...!Qué fuerza puede tener a veces la palabra "casi"! Es este límite del que estoy hablando. En la zona del "casi" ocurren cosas que nosotros, ávidos de delimitaciones que erróneamente confundimos con claridades, símplemente pasamos por alto. Y son las cosas que, al fin y al cabo, uno merece conocer. Porque entre mora y tierra está aquello que hace de la mora, mora y de la tierra, tierra.

    Un día tuve la estremecedora revelación de que en realdad lo que vemos al mirar hacia arriba de noche ES EL CIELO, y no un fondo negro donde están incrustadas las estrellas.

    Gracias por esta mora. En mi (no sé si) humilde opiinión, la foto sólo limita el haiku. Es un haiku tan acertado que cualquier concretización le quita universalidad.

    Perdona, Jan Carlos, soy demasiado directo, lo sé.

    Me alegro muchode que escribas cosas así, en honor del arte.

    Un abrazo,

    K.

    ResponderEliminar
  4. No eres directo K, eres sincero y eso es una virtud, cosa que falta en muchos sitios.
    Para nada me molesta el comentario de la foto, es más me halaga, porque quiere decir que el haiku en sí mismo es bueno. A veces añado fotos, para que no sea tan duro el blog; pero no me gusta abusar. Un buen haiku no necesita de fotos ¿verdad?
    Tú sigue comentando, que para mí es enriquecedor y un honor, el hecho de que sigas mi blog. Por cierto conocí un búlgaro llamado Marín Prodanov que es químico y ahora vive en Madrid, un tipo muy interesante y buena gente.


    Un Abrazo
    Juan Carlos

    ResponderEliminar